Normalmente los clientes acaban siendo amigos, pero en algunas ocasiones son los amigos los que acaban siendo clientes. Esta es una de esas ocasiones...Hace mucho, una tarde noche de Domingo, mi mujer, Loren, se cruzo con Bea, David y Luna, y muy nerviosa les dijo que iba a una cita a ciegas....nuestra primera cita. Cuatro años después Loren es mi compañera, amante, amiga y madre de mis hijos, y Bea y David mis amigos. Pero esta no es mi historia sino la suya.
Hace muchos años todo empezo en una escalera del Conservatorio de Musica Alfredo Kraus de Majadahonda. Alli, una noche, David y Bea se dieron su primer beso, allí comenzó todo. A día de hoy son amantes, compañeros, amigos y padres de Luna y, dentro de nada, de Julia. Os deseo todo los mejor porque sois buena gente donde los haya y porque siempre, David un poquito mas, me acabáis arrancando una carcajada. Ser felices, es una orden.
Abrazos y besos,
Alejandro Almeida.